Desde 2015, Toni Soto es el Hermano mayor de la Hermandad del Cristo de la Paz
¿Quién es Antonio Soto?
Nací en Barcelona el 17 de septiembre de 1972, casado y padre de tres hijos. Soy de familia sevillana y gaditana, rocieros y cofrades, aunque yo de niño y de joven no estaba por la costumbre que mis padres tenían. Fue a los 28 años, cuando fui padre por primera vez, que mi fe dio un giro y decidí involucrarme en la Hermandad.
¿Qué nos puedes contar de la Hermandad Cristo de la Paz?
La Hermandad Cristo de la Paz tuvo su origen en un vía crucis en el año 1985. Dado el interés mostrado por la gente, un grupo de personas entabló conversaciones con las autoridades civiles y eclesiásticas para hacer posible la Semana Santa en Castelldefels. Con mucha fe, ilusión y valentía se reunieron en torno al entonces párroco de Castelldefels, Mn. Lluís Joanet, y gestaron lo que es hoy la Hermandad Cristo de la Paz.
¿Cuál es la misión de la Hermandad?
La misión de la Hermandad es visibilizar los misterios de la fe haciendo llegar al corazón de la persona el misterio pascual.
¿Cómo conociste la Hermandad Cristo y qué te llevo a comprometerte con ella?
Fue a través de Lidia, mi mujer. Su familia eran cofrades de esta Hermandad y costaleros. En la Semana Santa del 2000 vi pasar al paso del Nuestro Señor Cristo Crucificado por la calle Rambla Blas Infante, y al pasar delante de mí, me dio un escalofrío y sentí curiosidad de saber que era eso de ser costalero. Era algo que no me había atraído antes, pero ese día se encendió una chispa y en la Semana Santa de 2001 entré a pertenecer a esta Hermandad.
La piedad popular es una catequesis pública de gran incidencia sobre la gente. ¿Es importante la fe de los hermanos?
El testimonio y la fe de las personas es lo que da vida a la Semana Santa. Por eso lo intentamos trabajar durante todo el año a través del compromiso en las celebraciones litúrgicas y la dirección espiritual del consiliario.
Para un cofrade, ¿qué significa la Semana Santa?
El cofrade, cuando llega la Semana Santa, saca su emociones, sus sentimientos, su devoción… Los nazarenos con su túnica y capuchón, los costaleros a su costal, las de mantillas y los músicos con sus trajes de gala procesionan por las calles. Ser cofrade es acompañar a Jesús y a María en el camino de la pasión. Expectantes ante los pasos de las imágenes, mientras la gente espera, el cofrade hace oración y penitencia ya que es un camino largo: muchas horas en la calle, de pie.
Es importante subrayar que ser cofrade es una vocación que dura todo la vida. Se es cofrade durante todo el año, aunque solo se procesione una semana al año. A Jesús se le debe acompañar y tenemos que acompañarlo durante todo el año y durante toda la vida.
Después de dos años sin procesiones, por la pandemia, este año nuestras imágenes volverán a procesionar por las calles de Castelldefels. ¿Cómo vivís este acontecimiento y cómo os estáis preparando para ello?
Con mucha ilusión y fe. Estamos ya con los ensayos de costaleros y costaleras en los distntos pasos, también con los ensayos de la banda de música y con constantes reuniones de la Junta de gobierno de la Hermandad. Cada miembro de la Junta realiza su función de trabajo, pero todos juntos formamos una hermandad.
Como hermano mayor, ¿qué mensaje lanzarías a los fieles de Castelldefels?
Les animo a vivir a fondo la Semana Santa para poder experimentar el sentimiento cofrade y la fe cristiana.
Mn. Samuel